Alfonso Del Olmo. Con la tecnología de Blogger.

lunes, 10 de diciembre de 2018

[Cuento] Como un día casi normal.

Salíamos de la uni, cansados como siempre de la pila de horas tragando información, dispuestos a irnos a casa para digerir y asimilarla. El Campus del Basse Riviere, solitario como siempre, era peculiar a su manera por el hecho de que a pocos metros se encontraba un gran barranco por donde pasaba un pequeño río. Harto de escuchar a mi padre decir, con toda la razón del mundo, que los barrancos así se producen de la erosión de cientos de años del paso del agua. La cuál es una información que ya tenía asimilada y aprendida y que nunca llegaría a olvidar. Cerca de este barranco había pequeños edificios, como casetas pero más grandes y como más modernos y grandes, y aunque me daba miedo acercarme mucho a estas casetas y al barranco, muchas veces encontrábamos allí viejos balones que, sin importarnos cómo ni por qué estaban allí, los cogíamos para jugar un rato antes de separarnos y despedirnos para irnos a casa. Ésta vez vi dos, aunque de igual diseño, tenían diferente tamaño. Uno pequeño, que parecía evidente que era de fútbol, y uno más grande, como las grandes pelotas de goma que teníamos en el cole, pero con el aspecto del típico balón de fútbol de la liga que es diferente todos los años.


Fui derecho sin demora a cogerlo mientras pensaba lo mucho que le gustaría a las chicas del grupo jugar con balón como éste. Pensamiento que se reforzaba cuando toqué aquel balón. Fue una sensación impresionante. Tenía un pacto tan estupendo y era tan perfecta que producía una sensación muy indescriptible. Me disponía a pasárselo a los demás, cuando un infortunio movimiento del extraño balón hizo que quedara al borde del precipicio. Tras unos intrigantes segundos de silencio en el que todos nos paramos y contuvimos la respiración, el balón cayó por el precipicio como todos nos habíamos imaginado y se perdió en el fondo del abismo. "Bueno, qué se le va a hacer. Otro día será", pensamos todos al mismo tiempo con la seguridad de que encontremos un balón parecido en cualquier otro momento en esta zona, grande o pequeño, siempre había allí por las razones que fueran...
En el momento de nuestra marcha para casa, aparcó un misterioso coche delante nuestro y se bajaron dos hombres de traje negro, camisa blanca y corbata nuevamente negra. Amablemente nos acusaron de haber destruido un importante artefacto del gobierno cuya función era la de ayudaba a estudiar y a mantener al medio ambiente en buenas condiciones recopilando la información del medio de alguna forma que se me escapaba de las manos, ya que aún no dimos en la escuela de ingeniería la asignatura de "artefactos secretos". Algo así me explicaron aunque me perdí por el camino.

Se me empezó a poner muy mal cuerpo en esos instantes. A todos nos invadió un pensamiento como de "no puede ser verdad". Yo a pesar del mal cuerpo, que me encontraba mal y cada vez peor, creí que mi deber en ese momento era hablar amablemente y con tranquilidad con uno de aquellos hombres para explicarle lo ocurrido y la verdad, sin necesidad de decir ninguna mentira y eso hice.  Él se mostró compresivo y dispuesto totalmente a escucharme. Lo primero que le dije fue que había sido yo, la idea fue mía, yo cogí el balón y yo lo tiré, y que no le iba a mentir. Le expliqué que éramos estudiantes de la universidad que se ubica en éste campus, y que como de costumbre buscábamos algún balón por allí, nada lejos de lo común, y cogimos el suyo con la mala fortuna de que se cayó al fondo del barranco y tomó contacto con la fría agua que pasaba por allí desde hacía miles de años.

Tras hablar discutir pacíficamente un rato con el hombre, intentando explicarle aún más razonadamente los hechos, y que nosotros no sabíamos lo que era ni teníamos intención de destruir aquel artefacto ni nada, me empecé a sentir tan mal que tuve que pedirle disculpas para salir corriendo a vomitar. El trayecto de vuelta a la uni se me hizo largo y a la vez corto ya que sin darme cuenta ya estaba en el váter vomitando sangre.

Salí del baño intentando aparentar que no había pasado nada, intenté retomar la conversación con el señor pero me dijo que ya se había solucionado. Le comuniqué en privado, que me encontraba fatal, que había vomitado sangre, y que antes de tocar el balón estaba perfectamente. El señor, con mucho disimulo y con cierto nerviosismo, me dijo que vaya a un tal médico específico. A continuación y me dio un código secreto. Me lo repitió 3 veces, y no llegué a copiarlo entero. Nervioso le dije que me ayudara, pero respondió que ya había hecho demasiado, que él no podía hacer lo que estaba haciendo y tal. El código empezaba por 583 y le seguía una serie de caracteres, que nunca llegué a tener...

Cuando llegué a mi casa intenté asimilar todo lo ocurrido. Había sido un día muy raro y no paraba de pensar en lo que me dijo el hombre sobre el médico y la ayuda que parecía que necesitara. El haber vomitado sangre y el encontrarme fatal... No me lo quitaba de la cabeza, a pesar de que en ese momento no me sentía mal, cansado quizá por el largo día de clases y de estudios de antes de que pasara todo.

Un fuerte dolor en el pecho me interrumpió el sueño en mitad de la fría noche. Me asusté mucho porque no podía moverme ni hablar, tan sólo mover los ojos, pensar, respirar y sentir ese horrible dolor en el pecho... Entonces cerré los ojos...

Cuando los abrí era de día. Estaba en mi casa, la de verdad. Mis porters heavys de Iron Maiden, Helloween y Avalanch, el de Iker Casillas levantando la Copa del Mundo en sudáfrica. Mi cabezón de lego lleno de cosas, mis coches de la guardia civil, y alguno de los Mossos catalanes. Mi corcho lleno de entradas de conciertos y mis diplomas de las Olimpiadas de Matemáticas de mi época del instituto. No estaba en el Basse Riviere donde estudiaba, estaba en mi casa, me sentía muy  bien y contento. De hecho, era verano, estaba en vacaciones y no tenía que estudiar. Entonces... lo de la pelota, los hombres de negro... era un sueño?

...O no...?




domingo, 25 de noviembre de 2018

Gracias Fernando.


2001
2003










2004
Sabíamos que éste fin de semana llegaría. Sabíamos que iba a ser éste en concreto desde que en verano Alonso anunciaba su adiós a la fórmula 1. Pero yo no sabía que me acabaría afectando tanto. Estoy triste por ello. Éste es un fin de semana muy especial para todo el mundo de la fórmula 1. En la que es la última carrera de la temporada, con todos los títulos decididos todos hablan sobre él. El asturiano que llegó tan joven a éste deporte y que impresionó al mundo entero. El asturiano que movió una marea de gente, de aficionados. Que trajo a toda España al mejor deporte del mundo. Acabó con el reinado de Schumacher cuando el Kaiser seguía teniendo el mejor coche, aquel Ferrari que tanto corría. Aquellos colores tan llamativos que coincidían con los de la bandera de Asturias en un coche icónico, el Renault que también corría mucho.

2005
Desde los dos títulos mundiales, los baches en el camino empezaron de nuevo a golpear la carrera ascendente del joven deportista español. McLaren perdió en 2007 un mundial que debió ser suyo, la vuelta a Renault no fue acertada, siendo aquel un coche muy poco competitivo. Los años de rojo son los que mejor recuerdo. Aquella primera carrera en Australia del 2010. ¿Se podía empezar mejor que ganando? Aquel año hubo mucha igualdad. El Ferrari era rápido. Los encontronazos entre Massa y Hamilton fueron una constante aquellos años. Una mala estrategia le alejó a Fernando de su tercer título, otra vez algo ajeno a él. Iba a ser una carrera fácil para Alonso, pero el culo de Petrov lo evitó.


2006
Empezaba así la era Red Bull. Los coches de Adrian Newey volvían a ser los mejores. Una aerodinámica perfecta que hacían de aquel un coche digno de ver en curvas. Sólo Alonso pudo luchar con lo imposible, ya que ningún coche estaba a la altura de aquella bestialidad. El Ferrari era rápido y aunque no estaban a la altura Alonso podía ponerles las cosas difíciles. Lo que sí tenía aquel Ferrari era fiabilidad, era muy bueno en ese aspecto, no fallaba nunca. No era de extrañar, era Ferrari. Del 2012 no voy a comentar nada por que lo tengo por aquí.

2007
Fue maravilloso vivir la fórmula 1 aquellos años. Los años de rojo fueron muy buenos, pero había que marcharse. Siempre tenían un coche bueno, pero nunca el mejor, y el primer año de la era híbrida el Ferrari dejó mucho que desear. Tras dos años sin pisar lo más alto del cajón del podio llegaba el momento de despedirse de Ferrari. Era algo que había que hacer. Había pocas opciones que no fueran McLaren, siendo ésta la mejor. Lo que pasó después nadie se lo pudo esperar. 4 años horribles.En los que yo siempre defendí al equipo, y en los dos primeros  a Honda. "Me gustaría mucho que esto es lo que viesen todos los rivales de Alonso, el culo del McLaren. Seguiremos soñando por el The Power of Dreams. Lo mejor está por llegar" Aquí expresaba mi deseo de que Alonso siguiera en McLaren y de que siguiera en Fórmula 1. El cambio de motor hizo ver que el coche de McLaren era malísimo y fue una decepción para todos.

2008
Nos da lástima por que tenemos la sensación de que su enorme palmarés no se ajusta a su inmenso talento. No tiene nada que demostrar, pero su pasión por el motor y por las carreras harán que siga compitiendo, ahora en el WEC, el año que viene también, además de las 24 horas de Daytona y la última corona que ganar, las 500 millas de Indianápolis para hacer historia que este año me he quedado con las ganas de verlas. Las puertas de la fórmula 1 siempre las tendrá abiertas, y si tiene la oportunidad de conducir un coche competitivo volverá seguro. No voy a explicar por qué ahora no lo tiene, porque me parece que es perder el tiempo.
2009

18 temporadas, 312 carreras, 21 vueltas rápidas, 97 podios, 2 títulos mundiales. Números que como he dicho antes, a pesar de ser una brutalidad, Alonso es mucho que más que eso. El piloto que no falla y el más inteligente... y sobretodo único, diferente... Lo sé yo y lo sabe todo el mundo que ve las carreras, el cariño inmenso de la gente se ha visto en las últimas semanas más que nunca viendo que el final estaba cada vez más cerca y llegó.

2010
2011
2012
2013


2014
2015
Gracias Fernando por hacernos vibrar, por hacernos felices y que olvidemos nuestros problemas durante tus carreras, por hacernos nuestros los tuyos. Por todos los momentos felices, grandiosos, y por los difíciles, los duros. Por levantarte, a ti y a todo tu equipo, a todo un país, tras esos momentos. Por hacernos soñar, por hacernos reír, por hacernos llorar en ésta última vez. Por ser un campeón dentro y fuera de la pista. Gracias por traer y hacer quedarse a tanta gente a este deporte, por darlo a conocer, por hacer que tus victorias y tus títulos se hablen más que de fútbol en un país donde tenemos a los mejores equipos del mundo en ese deporte. Gracias por hacernos madrugar mucho los domingos y con alegría, algo que parecía imposible.
2016
2017

Abu Dabi 2018
Todas palabras son pocas y me quedo corto. Un millón de sentimientos recorren a tanta gente en esta última carrera, donde la carrera en sí era lo menos importante y ha sido bonita, muy bonita. Pero faltabas estar tú delante. La gente te ha votado como piloto del día, querían que te fueras al menos con eso. El cariño de la gente es impresionante, también de los pilotos y de todo el mundo que ha dejado imágenes como ésta. Jamás he visto una despedida así a un piloto. Eres importante para todos y todos te echaremos de menos. Los españoles, tus seguidores y los que tenemos esa pasión por ti te echaremos de menos un poco más. Espero que puedas volver algún día con un coche competitivo, que ganes el campeonato mundial de resistencia, las 500 millas de Indianápolis y con ellas la ansiada triple corona que sólo consiguió Graham Hill en el 72. Seguiré viendo todas tus carreras, y seguiré escribiendo sobre ti. Gracias Fernando.
Despedida 2018 (Efeuno)
Querida Fórmula 1
"Este año pilotando a mi mejor nivel es como quiero recordarte"
"Los guerreros no son los que siempre ganan sino los que siempre luchan".
"Tengo otros retos más grandes de los que tú puedes ofrecerme"
"Se que me quieres y tú también sabes que te quiero" 

viernes, 9 de noviembre de 2018

Maravillosos Viajes en Tren.

El tren avanzaba, aunque sin prisa y con pausa, mientras empezaba a adentrarse en la oscura tormenta que esperaba en la región catalana, como si algo malo le esperaba allí. El día cambió de repente al cruzar la línea que separa Cataluña y Valencia. Atrás quedaron las maravillosas vistas alguna estación poco más allá de Valencia ciudad, una estación dónde se veían a 4 operarios limpiar un pequeño tren aparcado en una vía de allá. Las primeras y tímidas gotas caían sobre los cristales del que parecía un viejo tren curtido en mil y un viajes. Las continuas paradas en mitad de la lluvia hacían pensar que el anciano tren estaba bajo de forma, cansado y sin poder soportar unas condiciones que tampoco eran adversas, sino diferentes a lo habitual.

En Salou podíamos observar el rastro que había dejado la "tímida" lluvia por aquí y es que había paralelamente a las vías del tren y perfectamente observable y a pocos metros un río, hermoso y caudaloso, y con un flujo de agua notable. Cuando de repente pasa un coche con una considerable velocidad haciendo salpicar el agua hasta incluso el anciano tren. No era un río, era una calle. Espectacular también ver cómo se acumulaba el agua en una calle y aún más cómo pasaba alguna señora con sus comprar de la bolsa luchando contra los elementos de agua y aire.


Parada en mitad de ninguna parte, mientras se observaba desde dentro las espectaculares infraestructuras de las plantas químicas de Tarragona. Tubos de colores, camiones, grandes bolas, las llamas que salían de las chimeneas a pesar de la lluvia que estaba cayendo, en un mar de oscuridad por las nubes negras y el agua que se acumulaba en charcos de barro entre la soledad de entre aquellas infraestructuras. Ese paisaje desolador y triste que hacía de aquel un lugar aún más enigmático entre la oscuridad. La fuerza del ser humano y a la vez la ignorancia de aquellos que viajábamos en el tren, y de los que curiosos nos preguntamos qué se hace exactamente en su sitio así, para qué sirve todo lo que se ve, cómo tiene que ser trabajar en un lugar como ese...? Millones de preguntas que nunca me serán respondidas, o eso creo. Seguiré alucinando con estas cosas tan grandes y tan incomprendidas por la mayoría, tan espectaculares y tan impresionantes... de los paisajes que tienen fuerza, y no tiene por ser verde de árboles y plantas, azul del cielo y el amarillo del Sol como el típico paisaje de fondo del Windows XP. El mítico, vintage y retro Windows XP


Cuando el tren empezó a andar otra vez, después de años y años, ya habíamos cambiado todos pero el pobre tren seguía siendo igual (como diría mi profe "loulogio" de Expresión Gráfica), el mismo anciano con bastón que le cuesta andar. Nos quedaba pasar por Tarragona y ya daba un último tirón hacia Barcelona. Un gran viaje de muchísimas horas a pesar de que tampoco es tanta la distancia vertical de punta a punta del país.

La lluvia empezaba a pegar aún más fuerte mientras yo observaba la trayectoria del agua en el cristal y su comportamiento frente a la velocidad del tren. Al irse oscureciendo aún más el día por la ya ausencia del astro Rey a esas horas de la tarde, podía observar la mirada de quien lo deja todo con tristeza para ir a estudiar la carrera de sus sueños, a pesar de que su casa siempre será su casa y la seguirá considerando como tal, siendo Barcelona un sitio de mero tránsito aunque necesario para poder alcanzar la difícil meta.

Sin duda la mejor parte de los viajes en tren es cuando ponen las películas en la gran mini pantalla. En el trayecto de Tarragona - Barcelona nos pusieron, otra vez una película francesa y preciosa. "La Casa al lado del mar" sobre una familia cuyo padre está enfermo y se reúnen los 3 hermanos. Una película sin principio ni final, una trama muy escasa, y cosas que carecen de sentido. Una película que se puede ver cuando llevas 10 horas en un tren y no tienes otra que hacer hasta el punto de que me gustó, y puede que un futuro vuelva a verla para ver lo que ese día se me pudo escapar.

La mejor parte de los trenes, ya en serio y de verdad, es cuando se para en el destino escogido y tienes que levantarte y salir de allí, aunque el destino sea Barcelona, porque siempre hay muchas más ganas de llegar a casa, que a la no casa, pero cuando llevas un rato en el tren las ganas son de salir del tren. La gente que se levanta, y coge sus maletas y "objectes personales", 15 minutos antes de llegar me entenderán. Que parpadeas y ya se han ido.

A pesar de todo son maravillosos los viajes en tren, tienen su encanto, pero sólo cuando han pasado más de 5 días del viaje (a no ser que el destino sea tu casa). Bueno maravillosos tampoco son.


martes, 25 de septiembre de 2018

Luz en la Noche.




Escribir. Ese método de expresión mediante palabras. Palabras que se ven, aunque no se tocan, que se sienten, aunque estén lejos. Escribir de manera clara, formal, bello o bonito. Escribir para todos, para nadie, para ti, para alguien. La Luna llena bajo la ciudad condal es tapada por las viejas nubes. Nubes que llegaron desde más allá del mar Mediterráneo para soltar sus lágrimas en forma de lluvia, que a pesar de la baja intensidad fue de gran duración. Lágrimas no tristes a pesar del color muy gris de ellas algodonadas. Lágrimas que tras días de altas temperaturas necesitábamos. Una tregua a ese fenómeno tan usual en verano a pesar de que es cuando el astro Rey de nuestro pequeño sistema solar se encuentra a mayor distancia. Calor que tan cerca del Mediterráneo se vuelve pegajoso, húmedo, horrible para alguien acostumbrado al calor y frío seco extremos del pueblo en la montaña. Una montaña que protege al pueblo con pasión, una montaña solitaria en mitad de ninguna parte, de ninguna civilización. Un lugar tranquilo y despejado, el lugar de descanso de los dioses, el lugar de descanso de esta montaña, esta diosa, nuestra diosa y protectora, nuestra Sagra-da montaña, que tan lejos me queda ahora.


La noche es ya cerrada, las nubes se tiñen de naranja encima de la gran ciudad condal. El silencio de la noche se interrumpe con mi música, suena W.A.S.P. en mi potente Lenovo Legión con el que escribo estas palabras. Los ojos me avisan de que tengo sueño, estoy cansado y mucho, pero me quiero mantener un poco más. Los ojos, húmedos de las lágrimas que se me escapan al bostezar.



El otoño da los primeros compases, aunque con timidez por ahora con la pequeña llovizna de hoy, y continuarán próximamente las altas temperaturas, supongo. Aunque aquí ya empieza a ser cansino, un dolor de cabeza más. Con lo a gusto que se estaba en el pueblo el día que lo dejé atrás, tras un veranazo fresquito como pocos. Espero con impaciencia la llegada real del Otoño que lo tendremos hasta el 21 de diciembre. Bonita fecha. Fin de cuatrimestre, vacaciones de Navidad, o tiempo para estudiar, mejor dicho, para la última oportunidad de aprobar las asignaturas en la gran Final, aquella por la que te has estado preparando los 3 meses anteriores con esfuerzo y empeño.


Sentado en la cama y comiendome las uñas, miro a mi mesa flan iluminada por mi super flexo y siempre me pregunto si se acabará partiendose. La mesa que a fin de cuentas es un tablón de manera bastante fino con 4 patas atornilladas bastante finas también, que en conjunto acaba haciendo el parecido con el flan por su flexibilidad y movilidad tan sorprendentes. El tablón hace una apreciable pero débil parábola la cuál intento pesar cómo se expresaría de forma matemática. "Y" igual a "X" al cuadrado partido por un número muy grande (pongamos 1000), que cada día se hace más pequeño, lo que hace que la parábola muy abierta se vaya cerrando, que la curva sea mayor y que acabe siendo pasta de la física de partículas cuando las moléculas de madera se cansen de soportar una causa perdida y decidan separarse, dividiendo a la mesa en dos partes, cada una con sus dos patas correspondientes. Y espero que cuando eso ocurra, si ocurre, porque es bastante improbable, no tenga mi portátil encima.


Llegan la hora de irse a dormir, descansar para levantarse a las 7 al día siguiente para ir a las clases a la "Escola". Llega la hora 24, o la 0. Esa hora tan especial y singular en la que se cambia de día. Ya es martes y yo sin dormir aún. "Run to the Hills" suena ahora, de Iron Maiden, puesta a propósito por ser la que cerró el mayor concierto de Maiden en la historia de nuestro país, bajo el cielo de Madrid y en el grandísimo estadio del Atlético de Madrid, el Wanda Metropolitano. Y termino diciendo:

Buenas Gracias y Muchas noches.


Alfon



jueves, 19 de julio de 2018

Iron Maiden, Wanda Metropolitano de Madrid 2018.

Por fin llegaba el día, ese 14 de julio marcado en el calendario como, en palabras del mismísimo Bruce Dickinson, "El mayor show de la historia en España". Era el concierto más grande y multitudinario en nuestro país en los 43 años de historia de la mítica banda británica. Por primera vez en un gran estadio español, y fue el Wanda Metropolitano de Madrid, antiguamente conocido como "La Peineta", el que acogió este importante evento. Dos años después del vivido en aquel Barclaycard Center, hoy llamado Wizink Center, antaño llamado Palacio de los Deportes de Madrid, volvíamos a coger el coche y a hacer casi 500 km para acudir a la cita. Este año, en la gira del Legacy of the Beast, nombre del videojuego oficial para móviles de Iron Maiden donde Madrid sería fecha única en nuestro país y fue una concentración de gente no sólo procedentes de distintas parte de España o la península, sino que también de distintas partes de Europa.



Los heavys tomaron la capital española como pudimos comprobar en una vuelta que dimos por el centro el cuál observábamos muchísima cuyo destino aquella tarde sería el Wanda para el gran concierto. Los metros llenos de gente vestida de negro y con un mismo destino. Nosotros tuvimos que esperar a coger el siguiente porque las leyes de la física impedían que cupiera más gente. Una vez en el estadio y bajo el abrasante Sol de Madrid, buscábamos la cola para entrar en lo que fue un poco de desorden por parte de la organización. Y es que tras 20 minutos buscando nuestra cola, cuando faltaban 15 minutos para la primera actuación del día, los dioses nórdicos del power metal del siglo XXI, Sabaton, y nosotros en una cola que no avanzaba. Gracias al cielo, aquello cuando empezó a avanzar la cosa fue muy rápida y entramos justo cuando estaba sonando el "In the Army Now" de Sabaton, previa a su salida en escena. Abrieron con Ghost Division y dieron una gran actuación, con la siempre carisma y simpatía del cantante Joakim Brodém, el cuál dijo que Iron Maiden era la más mejor banda de Heavy Metal de la historia. Se me hizo raro verlos de teloneros, sin dar su verdadero espectáculo, siendo lo mejor con diferencia de la pasada edición del Leyendas del Rock, impresionando y sorprendiendo a todo el mundo. Gojira cogió el relevo tras la actuación de los suecos. De la composición francesa voy a hablar muy poco ya que no me gusta mucho ese estilo y apenas había los escuchado. Una especie de metal industrial con toques de death, gotic... para pasar el rato, pero no me llamaron la atención.

FB.Sobre el concierto en las Noticias RTVE
Sabaton - To Hell and Back

Eran las 9 de la noche, hora prevista para la salida de los dioses. Seguía entrando gente a pesar de que el Wanda ya estaba lleno. En la grada haciendo la ola, y cuando pasaba por encima el helicóptero de la policía la gente enloquecía como si hubiera salido algún integrante del grupo al escenario. Un auténtico espectáculo ya antes de empezar. Por fin empezaba a sonar el mítico ya Doctor Doctor, que a diferencia del puesto hace dos años, este era la versión original tocada por UFO. Un señor con traje de militar y digamos que de grandes dimensiones, posaba recto en el escenario con vista al público sin hacer gesto ni movimiento alguno, como un verdadero militar, y haciendo caso omiso a lo que había a su alrededor, o en este caso, a los casi 60 mil personas que tenía delante cantando "doctor doctor pleeeease!!". Éste, acabando la canción, procedió a quitar las tonas puestas para tapar el escenario. Entonces, las imágenes de los aviones de la segunda guerra mundial, y el conocido "We shall flight on the beaches", el discurso de Churchill, que acaba con el "We shall never surrender", en español "Nunca nos rendiremos". Los Dioses, los creadores y los más grandes de la música heavy metal de la historia conocida, estaban apunto de saltar y el avión, el Spitfire británico, a punto de despegar.

Comenzaba el espectáculo. Salió Bruce Dickinson con su gorra de aviador de detrás del escenario, pegando su primer salto y empezando a cantar Aces High, ases de las alturas, la canción que abre Powerslave (1984) y Live after death (1985) entre muchos otros e infinitos conciertos. "Live to fly, fly to live, Aces High". Pocas palabras existen para definir aquello. Sin apenas pausa, "Where Eagles Dare" fue la siguiente. Esta vez Dickinson portaba su abrigo blanco y gorro de casi esquimal, a pesar del caluroso verano español, para ilustrar mejor la historia que cuenta en la canción. "2 minutes to Midnight" y el primero de los muchos y conocidos "Scream for me Madrid" de Dickinson.  "The Clansman", un temazo de la época de Bayley, en contra de la guerra y pro libertad. "Freedom!!!". La banda con su línea de no parar ni a beber agua, sonó The Trooper cuando apareció el Eddie de dos metros y medio para vacilar a la banda y al público y batirse en duelo con Dickinson.


Revelations fue una auténtica mavarilla con las cristaleras del escenario y las viejas lámparas colgando, y Dickinson con su disfraz de esa canción. "For the greater good of god", inusual rescate de un temazo del "A matter of live or death" del 2007. The Wicker Man, con uno de los riffs más chulos del universo. "Sign of the cross", la canción que abre el primer disco de Blaze Bayley, y para mi la mayor sorpresa de este set list, pero toda una obra maestra y espectacular. Es que no se qué decir porque hay cosas que no se pueden explicar con palabras. En su oscuro manto se escondía Dickinson, detrás de la cruz que luego cogería y alumbraría al mundo con su luz, para terminar dejándola en lo alto del escenario. Flight of icarus, una pasada de canción, banda sonora de mi infancia y que no tocaban desde el 1986. Salió la estatua alada y Bruce Dickinson con un lanzallamas mientras cantaba la canción. "Fly as high as the sun, fly and touch the sun". Alucinante. Fear of the Dark, mi favorita. Con una máscara y un foco verde, una capa negra y como siempre sorprendente. The Number of the Beast, tras sacar las gárgolas, con el extraño solo de Dave Murray y el recado de Dickinson cambiando la letra de "I will return" a "We will return" en la parte final de la canción.

YT. Flight of Icarus
YT. Fear of the Dark
YT. Iron Maiden
YT. The Number of the Beast


Llegaba el turno de la canción que le da nombre al primer album y al propio grupo. Iron Maiden, la doncella de hierro, con ese característico sonido de finales de los 70 y toda esa potencia de quienes crearon el heavy metal, apareciendo la gigantesca cabeza del Eddie detrás de los protagonistas aquella noche. Tras una pequeña pausa, la única de aquella noche, iban a ir terminando. The evil that men do, del 88, igual que todas las anteriores todo un espectáculo que yo tenía muchas ganas de ver. Hallowed be thy name, tras los problemas legales que hizo desaparecer esta canción en la segunda parte de la gira The Book of Souls. Una de las grandísimas y clásicas canciones. Y para cerrar, procedente al igual que la anterior del disco The Number of the Beast, 1982, el primero de Dickinson, Run to the Hills. Otro de los icónicos temas de la banda británica que así terminaba el que fue el concierto más grande en España de los dioses.

YT. The Evil that Men Do
YT. Hallowed be thy Name + Run to the Hills.

"Todo tiene su fin" como dice Medina Azahara, para desgracia de todos los presentes que estábamos allí y no queríamos que aquello acabara, a pesar del cansancio ya acumulado durante todo el concierto debido a no parar de saltar. Mientras sonaba el conocidísimo "Always Look on the Bright Side of Life", típico inglés, mientras yo seguía saltando como si los Iron Maiden no se hubieran despedido definitivamente aún. El río de gente, miles y miles de personas salían del gran estadio. Los autobuses preparados, salían hasta los topes de gente, mientras otros decidimos ir en el metro para volver, en la mayoría de los casos, al hotel a descansar.



Ver a Iron Maiden, otra vez, y con el espectacular momento de forma de Bruce Dickinson y de la banda en general, es algo que nunca olvidaré por ser una de las mejores experiencias de mi vida, y éste, el concierto más grande de mi vida que sólo los propios Iron Maiden podrán superar. "We will return" y yo espero volver a estar para ver si consiguen superar lo más grande. Los maestros de la guitarra, Murray, Smith y con sus malabares con la guitarra y bailarín Janick Gers. Steve Harris, el genio y Dios supremo, líder de la banda más grande del universo, siempre con una sonrisa y haciendo sus habituales gestos con el bajo hacia el público. Nicko McBrain, impecable a la batería como siempre, el abuelete del grupo. Y por último Bruce Dickinson, que en breve cumplirá 60 años, parece un chaval de 20 por el escenario. Increíble. Retratando las canciones con su disfraz y llegando a notas muy exigentes en canciones como Aces High. Y creo que lo escribí hace un par de años, pero me impresiona verlos y que parezcan personas normales, con sus piernas, brazos, pelo canoso... y sin embargo no son personas normales.

Rafa Basa > Crónica Sabaton + Gojira
Rafa Basa > Crónica Iron Maiden
YT. IRON MAIDEN @ Madrid 2018 FULL SHOW


















































YT. Fear of the Dark live @ Tele2 Arena, Stockholm Sweden 2018-06-01
YT, The Wicker Man Live @ Hartwall Arena Helsinki 28.5.2018
YT. Sign of the Cross Live @ Expo Plaza Hannover 10.6.2018

domingo, 6 de mayo de 2018

Fernando Alonso logra la victoria en las 6 horas de Spa.


Ayer comenzó el campeonato mundial de resistencia con dos grandes novedades en esta edición. La ausencia de Porche en la gran categoría de LMP1 y la presencia de un bicampeón del mundo de fórmula 1 a los mando del Toyota híbrido número 8. Fernando Alonso debutaba en esta categoría de resistencia con la esperanza puesta en volver a pisar lo más alto del podio y saborear su champán. En una jornada en la que todas las miradas se dirigían a él, Alonso volvió a brillar como un niño, a conducir como siempre y a ganar como nunca. Y me refiero a ganar por primera vez una carrera de resistencia, la primera de este campeonato, y ganar en este circuito tan especial y mítico, donde ganó por última vez en la fórmula 3000 hace 19 años.



Vi con gran ilusión anunciado en la tele que se retransmitiría en directo esta hermosa carrera. Por primera vez cogía fuerzas para enfrentarme a una carrera de resistencia, seis horas de coches a los que no estoy acostumbrado y una categoría totalmente desconocida para mí. Me sentaba en el sofá y empezaba a observar los distintos pilotos. Muchos me sonaban de la fórmula 1. El sobrino de Ayrton, Bruno Senna, Pastor Maldonado, Sebastian Buemi como compañero de Alonso, Kobayashi en el otro Toyota, Vergne, Van der Garde, Fisichella... Y Button que no estaba pero porque corría otra carrera en Japón y lo veremos en Le Mans. Y con toda la ilusión del mundo, yo afrontaba esta carrera como algo especial, en mi circuito favorito y Buemi, con el coche número 8 de Alonso desde la pole.

Alonso volvió a iluminar otra tarde, volvió a hacernos disfrutar a todos los seguidores de las carreras. Ya lo hizo en Indianápolis, y lo hace en la fórmula 1 aunque no gane. Yo disfruto muchísimo verlo correr siempre, porque es puro espectáculo. Su manera de conducir y de leer las carreras, prepararse los adelantamientos... Y su prestigio mundial, su nombre hace que suba el seguimiento de estas carreras, no sólo en España sino en todo el mundo. Esta vez se enfrentaba a una carrera muy difícil, una categoría muy complicada y muy diferente a la fórmula 1. Pero el talento infinito de Alonso hace que se adapte muy bien a los cambios. Eso también le hace un grandísimo piloto. Pocos campeones se atreven a dar este salto de categoría.

Alonso no tiene que demostrar nada a nadie, y es que sus genialidades se ven en todas las carreras de la fórmula 1. Tiene muchísimo talento y para mí es el mejor piloto de todos y está a la altura de Ayrton Senna. Tuvo la gran valentía de decidir correr los dos mundiales, y el de resistencia tiene muchas opciones a ganarlo. El Toyota que conduce junto a sus compañeros Buemi y Nakajima es de los mejores o el mejor de la competición, corre un montón.

La próxima es Le Mans. La mítica carrera de 24 horas que Marc Gené ganó en 3 ocasiones. En su ambicioso plan de conseguir la Triple Corona (Mónaco, Le Mans, Indianápolis) que tan sólo un piloto ha logrado en toda la historia. No quiero hablar de los anti alonsistas porque entiendo que sean ignorantes y no vean las carreras. "Alonso está acabado, ya no es el que era". Por el simple hecho de no ganar. Este deporte es muy difícil. Alonso cuando ganó los dos mundiales sólo tenía su talento infinito. Ahora tiene eso y además la experiencia que le hace mucho mejor piloto que antes. Todas palabras son pocas para definir este monstruo y me da pena que en España no sepamos valorar los grandes deportistas que tenemos y no le respetemos.

Con 26 puntos, Alonso encabeza la tabla del mundial de resistencia. Intentaré ver Le Mans y espero que este año sigan las alegrías y los triunfos porque se lo merece Alonso, todos sus seguidores y todos lo seguidores de las carreras que van a disfrutar como nunca viéndolo correr. Es puro espectáculo.